Nuclear

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jueves, 24 de mayo de 2012

El vino de Cataluña

El fin de semana pasado tuve una boda en Vilafranca del Penedés, y como sólo se me ocurren cosas relacionadas con echar espumarajos por la boca con la crisis y el curro y los estudios no me dejan nada de espíritu crítico voy a hablar un poco de las minis vacaciones que me pegué.

Llegué a Vilafranca el viernes ya casi por la noche así que el primer día no hice nada más que vaguear en el hotel descansar.

El domingo fue la boda, en la Iglesia románica de San Martí Sarroca. Aquí pongo la foto de la Wiki, por que, como comprenderéis, no me iba a ir a la boda cargando con una cámara... teniendo en cuenta que iba a una boda en la capital vitivinícola de Cataluña.

San Martín de Sarroca - Esta foto no es mía...ohhhhhhh

El banquete fue en una masía con un entorno chulísimo... en mitad del Penedés... mejor que sitios por los que la gente se pega como la Toscana... pero mucho más barato.

Por la noche, terminé cerrando bares, haciendo actividades socioculturales por Vilafranca con unos amigos del novio a los que no conocía.

El domingo por la mañana aproveché que había fiestas en Vilafranca para, además de aprovechar para ver el pueblo, para ver unos castellés, los había visto hace nueve años en Tarragona, pero no había tenido ocasión de repetir hasta ahora.

Esta colla de castellés eran los mejores de los que participaron en la exhibición

El pueblo tenía algunas iglesias y edificios que no tenía mala pinta... ¡¡¡ PERO ESTABAN TODOS CERRADOS !!!... bueno, todos menos una iglesia desacralizada que habían convertido en museo, la capilla de San Juan. Tuvo gracia, por que me extrañó que non hubiese nadie vigilando la exposición que había, la iglesia o la imagen que la presidía. De ahí me fui a ver un convento que estaba cerrado y cuando le pregunté a una mujer me dijo "está cerrado por que nos lo roban todo si no"... yo sabía que había problemas protegiendo al románico catalán, pero me imaginaba que llegaba a estos niveles de alarma.

Vista general de la Capilla de San Juan

Detalle de la Capilla de San Juan, la estatua que está tras el altar

Basílica de Santa María

Casa Gomá

Tras esto comí y viendo que Vilafranca ya estaba vista, decidí irme a Barna a pasar la tarde del domingo. En plan así, turístico, sólamente fui a ver la torre Agbar, que no la había visto aún... lo mejor sería la idea que se me ocurrió paseando por las ramblas.

Vista general de la Torre Agbar

Detalle de la Torre Agbar

Siempre he querido ir a ver "algo" al Liceo. Pero siempre que iba a Barna, o había cosas que no me gustaban o no tenía tiempo o no había entradas... total, a las 19:40 paso por delante y veo que a las 20:00 cantaba Ana Belén... y había entradas... dudé dos manzanas, durante las cuales me alejaba pensando que era una tontería... pero al final no pude resistirme... y fue un conciertazo. estuvo un poco floja en alguna canción... pero en la mayoría echó el resto.


Buenas, aquí, el Liceo, aquí Hm. Encantado

Desde platea lo vi... claro.

Después de eso, recogí los bártulos, que el lunes tenía que volver a Cartagena (no trabajaba por que me había cogido vacaciones) e iba a ser un día duro, ya que tenía decidido hacer algo parecido a las maratones que hago cuando voy de viaje por el extranjero.

viernes, 18 de mayo de 2012

Aaaaaaaaaa

Imaginaos una operación. A un paciente le van a operar de un pequeño recrecimiento en el paladar: le anestesian, el cirujano empieza la intervención y cuando está quemando la zona, el enfermo se pone a agitar las manos y a decir todo lo claro que se puede decir con un bisturí eléctrico en la boca "gooooooeaíiiiiiiiiii". Se me queda mirando el cirujano, saca el bisturí y me dice - ¿qué pasa? - "no es ahí". El médico, que estaba al lado, se acerca, me abre la boca, mete un dedo y dice señalando, "tiene razón, no es ahí, es aquí".

 El médico y el cirujano... en rojo, el bisturí eléctrico

Resultado, una herida mucho más grande que ya parece hoy que ha cerrado después de casi dos semanas... mis historias, ya sabéis.

martes, 8 de mayo de 2012

Persia, el sátrapa y los griegos

Ayer Hollande se podía sentir satisfecho al oir los acordes de "La vie en rose" mientras celebraba en Tulle, su victoria en las presidenciales francesas. Acapararía el poder casi absoluto que la monarquía republicana otorga a su presidente y coparía todas las portadas de la prensa occidental

Sólo 24 horas después anunciaba que iría a ver a Merkel a Alemania, como si fuese un gobernante de una satrapía que va a presentar sus respetos a Darío; se empezaba a desmoronar las esperanzas... no habrá nada más que un maquillaje para satisfacer el ego de los hijos de San Luís.


Ayer mientras Francia mandaba, en su línea, a Sarkozy a la guillotina, Merkel perdía el parlamento de Kiel e Italia optaba por el absurdo de un payaso, Grecia elegía el caos.

Europa miraba absorta a Lyon, a Burdeos, a Marsella, sin saber que el futuro de Europa no se decidía en los suburbios de París, sino en las calles de Plaka.

El barrio de Plaka