Nuclear

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jueves, 30 de septiembre de 2010

Los que van a salvar la democracia (eso dicen ellos... con pasamontañas)

Los señores Toxo y Méndez han conseguido dilapidar el poco crédito que les quedaba a los sindicatos, crédito cimentado en una intensa y eficiente labor en los años ochenta y que ha ido perdiéndose por la progresiva burocratización y clientelismo que los ha invadido.

Los señores Toxo y Méndez han convocado una huelga contra un gobierno que han sostenido mientras tomaba medidas económicas que más que duplicaban el paro y que eran, no ineficientes, si no nocivas para la economía de España. Primer motivo por el que no creí en esta huelga.

Los señores Toxo y Méndez han convocado una huelga contra una reforma meses después de su publicación, por miedo a hacerla en verano, con mundiales de fútbol y baloncesto y poco menos que por la presión que empezaban a sentir por parte de la sociedad, en la que se había asentado la idea de que los sindicatos no mivían un dedo (cosa que es cierta, no hablamos de sindicalistas puntuales, que hay gente de todo tipo, hablamos de las estructuras). Segundo motivo por el que no creí en la huelga.

Los señores Toxo y Méndez han convocado una huelga como el que quedaba para hacer un botellón en los años pasados, tal día, sobre esta hora y por tal sitio. La han convocado con un miedo terrible a contrariar a un gobierno en el que han tenido mano hasta no hace mucho, cuando Méndez se vanagloriaba de ser prácticamente el "tercer vicepresidente del gobierno". Los señores Toxo y Méndez sólo han empezado amovilizar a sus bases cuando veían venir que la huelga podía ser un fracaso de dimensiones bíblicas y les empezaron a temblar las piernas. Tercer motivo por el que no apoyé la huelga.

Los señores Toxo y Méndez han convocado una huelga contra un decreto del gobierno y nada más, no sería un secreto a voces de que este gobierno lleva ya muchos minutos de prórroga, símil adecuado si consideramos el término inglés para la prórroga, injury time "tiempo lesivo". Es por eso sorprendente que por primera vez en la historia de España (seguramente en la de cualquier democracia) se haga una huelga general, pero no contra el gobierno del país, sino contra un abstracto ellos... ¿los capitalistas?, ¿los pitufos?, ¿el Real Madrid?... Cuarto motivo por el que no apoyé la huelga.

Y finalmente, el más importante, nos guste o no nos guste, esta reforma, estos recortes y estos presupuestos ya no quedaba más cojones que hacerlos (de hecho vinieron en gran medida dictados desde fuera, entre otros por el anteriormente querido Obama) debido al desbarajuste presupuestario que se había hecho en las cuentas públicas. Por tanto, yo no estaba en contra de las reformas, me parecen tristes en sí y un triste castigo por la ineptitud de nuestros líderes, por la incapacidad de nuestros gobernantes.

Al final, las consecuencias de esta huelga son terribles. Si no teníamos bastante con un Senado que no pinta nada, un Congreso que no se lo toman en serio ni los propios diputados, un gobierno que parece sacado de una página de 13 Rué del Percebe, que iría a la quiebra en el Monopoly en tres jugadas, un Tribunal Constitucional en el que la Justicia no tiene ya ni espada, ni balanza ni venda, una oposición de la que lo mejor que se puede pensar es que tienen un conejo en la chistera, por que como todo lo que tengan que proponer sea lo que vemos, estamos apañados, ahora además, tenemos unos sindicatos, que si bien no tenían ya apenas crédito, han perdido incluso el respeto de la sociedad, que se los toma a coña.

Dicho todo esto, voy a comentar (si no se ha aburrido la gente ya) como fue mi jornada de huelga.

Me levanté antes de mi hora normal, a las 5:00h en vez de las 6:45h) para ir a currar a la fábrica... pensando en evitar atascos por piquetes informativos intenté entrar con el autobús del turno (por lo que pasase me dejé mi coche en el garaje). Cuando llegamos, había un piquete de una de las otras empresas grandes que hay en Cartagena que decía que no iban a pasar ni los servicios mínimos... estuvimos así retenidos una hora hasta que llegaron los antidisturbios y empezaron a formar, después de varias amenazas, cuando ya les dieron el ultimatum de que o se quitaban o cargaban, se retiraron y dejaron pasar a los vehículos.

Lo más sorprendente es que estando en el autobús, escuchabas a la gente que iba dentro a trabajar como se iba calentando y empezaba diciendo gente cosas como "como no se quiten pronto nos bajamos, entre los tres autobuses somos más de tres veces ellos (ellos eran unos treinta) y si nos liamos a hostias los quitamos de en medio y pasamos" y terminaban con las cámaras de foto y de vídeo preparadas y y diciendo cosas como "a ver si les zurran ya de una vez los antidisturbios y podemos pasar de una vez"... quiero aclarar que quien decía estas cosas no eran ni directivos, ni ejecutivos, ni los perversos (parece ahora ) autónomos... eran operarios, obreros de la fábrica.

A media mañana, te podías dar cuenta de que no sólamente habían venido todos los servicios mínimos, sino prácticamente todos los operadores que no eran servicios mínimos, casi todos los empleados de mantenimiento, todo el personal que trabaja en oficinas, todos los técnicos y varias contratas (las que habían llegado pronto y habían podido pasar). Seguimiento, mientras el piquete amenazaba a la gente y no dejaba pasar 100 %. En cuanto se fue... voy a decir un 2 % de la empresa por ser bueno (En los contratistas sería un 60 % o así).

A la salida sin problemas ya, llegué a Cartagena, me compré el pan en la panadería, en una tienda que me pillaba de camino unas patatas para la comida y ya está. Como me dijo la panadera, "yo he estado con la panadería baierta toda la mañana porque no ha pasado piquetes, por no-sé-donde han hecho cerrar, pero tal como se iban, vovían a abrir"... lo dicho, es lo que tienen las elites de este país, que lo hacen todo a espaldas de la gente.

10 comentarios:

Stultifer dijo...

Toxo y Méndez son los Epi y Blas de la tele. Los Cirilo y Metodio y los Cosme y Damián. Vaya par.

Persefone dijo...

Yo tampoco apoyé la huelga. Como tu bian has dicho, las medidas tomadas por el gobierno, si bien no son justas, son necesarias y ademas las instrucciones vienen de fuera. Creo que los sindicatos han defraudado a muchos, porque mientras han estado chupando del frasco no han dicho ni mu.
La actitud de los piquetes, me parece deplorable. Hubo gente que no fue a trabjar por miedo, no porque apoyase la huelga. En esta pais hay libertad de expresión. El día 29-S los piquetes se encargaron de vetar ese derecho...
Estoy bastante indignada con el tema...

Mil besos!!

supersalvajuan dijo...

La democracia murió hace tiempo. Y de esos señores y sus siglas, que se suban al andamio y no hablen más, que trabajen, joder.

...Runagay dijo...

Yo me he leído todo el post y desgraciadamente no me he aburrido. Posiblemente coincida con tu crítica a los sindicatos, de hecho no estoy afiliado a ninguno, pero mal andamos si ni siquiera sabemos reconocer al enemigo. Yo sí fui a la huelga.

MM de planetamurciano dijo...

Muy de acuerdo con el señor Runagay; los sindicatos tendrán muchos defectos, pero lo ke tengo clarísimo es los ke, ni por ekivocación, van a mover un dedo por mí; estoy mirando por encima del hombro, a la derecha...
Leí una cosa en facebook ke me pareció muy oportuna ¿ Por ké los medios no han sacado ni un caso de empresarios ke también presionaron pa ke sus trabajadores no fueran a la huelga? Porke los había y yo conozco al menos dos.
Y otra cosa kiero decir; ke se demonice a los sindicatos teniendo el nivel empresarial ke tenemos en este país es como ponerle a la zorra la gallina en la boca pa ke la proteja.
En lo ke llevamos de crisis ya hemos cargao contra funcionarios, inmigrantes,sindicalistas...¿Kienes son los siguientes?

Oz Vega dijo...


Hay ocaciones en que los mismos tentaculos de la protesta son los que la invalidan por completo... de eso no queda duda.
Maldito el momento en que los encapuchados se toman la universidad y me toca salir por la puerta de atras entre gases y piedras... es de lo peor.
Un abrazo mi amigo

OZ【ツ】

Sufur dijo...

Me estoy haciendo viejo. Se me había pasado por alto su entrada a pesar del blogroll y todo...

Como sabe, yo tampoco hice huelga, ni casi nadie que yo conozca. Y es que usted ha dado en el clavo: siempre sospeché que era contra los pitufos, y contra los pitufos no se puede luchar. Que se lo pregunten si no a Gárgamel...

Qué país :-(

Angel dijo...

Totalmente de acuerdo contigo en tus apreciaciones.
¡Qué pais!
Un abrazo!

Thiago dijo...

Cari, lamentablemente no estoy de acuerdo para nada con tu artículo.... Entonces tú qué propones? que los trabajadores y los sindicatos se queden quietos y callados ante el decreto? Yo no lo acabo de entender.

la gente protesta de que los sindicatos no hicieron nada estos años pasados, y ahora que lo hacen tb. les critican...

entonces, como no se puede hacer nada, según tú, es mejor esperar a que otro decreto nos baje el sueldo otro 5%? nos suban la edad de jubilación? Creo que la gente está muy acomodada y que a pesar de la crisis viven bien y nadie quiere saber nada del compromiso ni de la solidaridad ni de nada...

Pues no debería ser así, y en Francia los sindicatos están a la greña con Srakozy y creo que hacen bien. La huelga no es contra zapatero ni contra un gobierno ni nada, es contra una politica del DINERO, de los BANCOS que son los que nos están mangoneando. A mi no me parece mal que se proteste, es más, creo que se debería hacer más, quemar bancos, por ejemplo... Has leído lo ultimo en USA: Los bancos están quedándose con las casas de la gente con procedimientos ILICITOS e ILEGALES... le han quitado la casa a uno ¡¡¡QUE HABIA PAGADO EN EFECTIVO!...

Pero, nada, la gente piensa que no hay que hacer huelga ni protestar ni nada... pues así nos va.


Bezos.

hm dijo...

Bueno, al fin he vuelto, voy a contestar un poco así en genral (entre otras cosas por que toco la respuesta tangencialmente en otro post que estoy haciendo). Pero sólo diré que me parece un error, muy nuestro por otra parte, eso de separar las cosas en "los nuestros" y los "otros".

Además de parecerme un análisis simplista de la situación, me resulta siempre de muy mal rollo el concepto ese de los otros, ya se me incluya a mi en ellos, o en los "unos".